[entradilla]Te contamos la mejor manera de cuidar y limpiar tus carteras y monederos para que sepas mantenerlos más tiempo impecables y como nuevos. [/entradilla]
Los complementos y los accesorios son una parte importante del universo femenino, objetos casi de culto podríamos llegar a decir, y en los últimos años han ganado mucho protagonismo en el mundo de la moda por su papel a la hora de poner la guinda a los outfits y completarlos para que luzcan perfectos.
Las carteras, los bolsos y los monederos son un‘must have‘, algo que las mujeres usamos a diario, y por eso sufren más desgaste que otros complementos. Este deterioro normal es posible frenarlo o minimizarlo contando con la información adecuada. Y es que, al igual que cuidamos y lavamos nuestras prendas de vestir, siguiendo las indicaciones que marca el tipo de textil o el material en el que están confeccionadas, los complementos y los accesorios también necesitan un mantenimiento y una limpieza de vez en cuando.
En este post queremos darte unos consejos que puedes poner fácilmente en práctica, porque si conoces cómo cuidar y limpiar tus carteras y monederos, no sólo les alargarás su vida útil, sino que los mantendrás como si fueran nuevos.
Consejos para cuidar y limpiar tus carteras y monederos
En un momento dado puedes detectar que tu cartera, bolso o monedero tiene un aspecto viejo, como gastado, pero ¡no te fíes!, porque esa señal quizás lo único que te indique es que necesita un lavado de cara para volver a lucir igual que cuando lo compraste.
También te puede ocurrir, que descubras una mancha en la superficie y no sepas ni en qué momento pasó, ni cómo se produjo. No te preocupes y mantén la calma, porque por lo general todo tiene solución aplicando unos sencillos consejos de limpieza, que variarán en función del material que debas limpiar. Estas son las claves que debes tener en cuenta. Lee con atención:
Carteras y monederos de piel
La piel es delicada, con el paso del tiempo puede decolorarse, agrietarse e incluso absorber humedad, y por eso requiere de una limpieza regular para permanecer en condiciones. Colocar las carteras y los monederos en un lugar aireado y alejado de una fuente de calor preservará inalterable la piel, y si no tiene manchas específicas que puedan dañarla, con pasarles un paño húmedo (usa agua mineral) muy escurrido con algunas gotitas de jabón limpiador de cuero, y secarla después con otro, le devolverás su lustre natural.
Los jabones o sprays especiales para tratar la piel suelen estar a la venta en tiendas especializadas y en algunas zapaterías y supermercados. Nunca uses aceites que puedan dejar manchas de grasa, betunes de colores, etc., ni expongas la piel al agua del grifo, porque el cloro es su enemigo número uno y la echaría a perder sin remedio.
Cuando a lo que te enfrentas es a eliminar una mancha de tinta, un algodón empapado en alcohol, pasado por la zona sucia, suele dar muy buenos resultados. Y si la mancha es de grasa, con pasar un paño seco por encima hasta que se absorba o desaparezca, será suficiente también.
Carteras y monederos de gamuza o ante
La gamuza es una piel fina y flexible de tacto sedoso y suave. Por sus características es muy delicada y cualquier manchita puede ocasionar un destrozo grande. Para evitar que esto suceda, hay que tratar de que no acumule polvo y por eso es recomendable que guardes la cartera o monedero de gamuza, que no uses de continuo, bien envuelta en una bolsa de tela, en un papel de seda, etc.
Si necesita una limpieza para devolverle su aspecto original, debes hacerla con cuidado. El polvo puede eliminarse cepillando toda la superficie con un cepillo de cerdas suaves. Y si tiene alguna mancha, aplicar un poco de soda sobre ella, dejarla secar, y después pasarle un cepillo fino por encima en movimientos circulares, sin presionar ni hacer fuerza, puede ayudarte a quitarla. El talco absorbe la humedad, y cuando la mancha es reciente, también funciona muy bien.
Carteras y monederos sintéticos
El material sintético puede estropearse con más facilidad que la piel, sufrir arañazos o rayones y pelarse, y también necesita cuidados, aunque no tan delicados. Eliminar los restos de suciedad y polvo es tan fácil como usar un trapo en el que viertas un poco de alcohol y pasarlo por encima. El alcohol actuará de limpiador y se evaporará a los pocos segundos, no dejando ninguna señal.
Si hay alguna mancha que persiste, puedes insistir humedeciendo un paño con agua mineral y jabón orgánico o natural, o champú (si no tienes de niños o bebé, normal) y pasarlo de nuevo por toda la superficie. Secándola después por completo para borrar cualquier rastro de agua.
Si una buena limpieza no salva tu cartera o tu monedero y necesitan un reemplazo, echa un vistazo a nuestro catálogo de Caminatta. Encontrarás diversas colecciones, diseños y acabados para que elijas aquello que mejor se adapte a lo que estés buscando.